martes, 23 de noviembre de 2010

Peste de sociedad.

Una vez más me sorprendo con otro miembro más de mi familia tan extensa.
Por no acordarme de ella, no me acordaba ni de su nombre... Bendito facebook. Y bendita la madre que los parió a los cuatro hermanos. ¡Qué pedazos de tios tengo!
Empezamos hablando de lo típico ¿Qué tal? Hace mil y más que no nos vemos...
Y acabamos hablando de lo que realmente nos afecta ahora: La sociedad, el mundo, la política, la reforma laboral...
Sarita, eres una pequeña roja con ganas de cambiar el mundo y ansias por saber y saber más, para conseguir hacerlo. Con una verborrea alucinante y madurez según mi pariente mayor. Y si según ella, no me falta razón y tengo mucha iniciativa y blablabla... ¿Por qué la cosa no cambia? Hay más gente que piensa como yo. Sé que no es tan fácil pero lo vemos demasiado complejo para lo que en realidad será.
Se empieza con cosas pequeñas y luego se llega a lo más grande. Se empieza por el cimiento para llegar después al tejado. De las masas hacia arriba... Estamos cansados de orilo, repetirlo... Democracía, democracía...
Creo que va siendo hora de empezar a hacer algo de verdad y dejar de quejarnos tanto porque así, no se llega a ningun lado. Ya lo estamos viendo.
- El mundo no se puede cambiar, Sara - Dicen los fachas de mi clase- Está muy bien como está. Si no te gusta tu país lárgate. No queremos rojos como tú en España.
- Desde luego, con gente como tú y pensamientos así, el mundo no cambiará nunca. Nos quedaremos estancados y sólo iremos a peor. Si también está el país ¿cómo coño hay tantos millones de parados? ¿Tanta crisis? ¿Tanta pobreza, hambre... Miseria? ¿Por qué estamos en esta puta decadencía que nos come ahora y nos comerá en el futuro próximo que es a la hora de trabajar? ¿Qué coño piensas hacer en tú futuro? ...
Me iría, pero este mundo es todo igual. Tan igual que no hay igualdad en ninguna parte del mundo.  
¿Mercantilismo? ¿Liberalismo? ¿Neoliberalismo? ¿Globalización?
Todo la misma mierda.

Nami!

No hay comentarios:

Publicar un comentario