jueves, 25 de noviembre de 2010

Fragmento. Las corridas de toros.

Así es que amanece el lunes, y parece que los habitantes de Madrid no han vivido los siete días de la semana sino para el día en que deben precipitarse tumultuosamente en coches, caballos, calesas y calesines, fuera de las puertas, y en que creen que todo el tiempo es corto para llegar al circo, adonde van a ver a un animal tan bueno como hostigado, que lidia con dos docenas de fieras disfrazadas de hombres, unas a pie y otras a caballo, que se van a disputar el honor de ver volar sus tripas por el viento a la faz de un pueblo que tan bien sabe apreciar este heroísmo mercenario. Allí parece que todos acuden orgullosos de manifestar que no tienen entrañas, y que su recreo es pasear sus ojos en sangre, y ríen y aplauden al ver los destrozos de la corrida.

M. José Larra

¡Menudo enano el que se hace grande!

Hoy, hace catorce años de que mi madre se quedó muy a gusto de expulsar al cerebrito de mi hermano al mundo (Obviamente, no a propulsión).
Sí, sí! Ya son catorce añazos que hace que tuve un hermano pequeño. Dejé de ser la enana para siempre.
Es curioso, como a medida que pasaban los años voy recordando más cosas, como es normal, y precisamente con él he hecho casi que casi una limpieza de los malos momentos y sólo me he quedado con los buenos. Al contrario, por ejemplo, que de otra mucha gente que te quedas con un "fifty fifty" de todo, más o menos. Pero con él no.
Mi hermano pequeño es...
Un petardo. Está claro, si no, ya no sería un hermano pequeño en condiciones.
Un cerebrito. Puedo contar las veces que le he visto estudiando con las manos y me sobran dedos... Muchos dedos. Lo peor o lo mejor, es que ha suspendido solamente una en su vida y en un trimestre. Qué envidia!
Un fantástico guarda espaldas. ¿Cuántas le deberé ya?
Un vago, un perezoso, lento, chinche... Un enano.
Un puntazo, alguien a quien regalar tu confianza... Un amigo.
Simplemente es él. Ese enano que siempre ha hablado a la perfección, que se interesaba más por el mando que por mi hermana recién nacida, que sacaba dieces en matemáticas sin abrir el libro y que puede tirarse las horas en casa tocando la guitarra, el bajo o leyéndose las enciclopedias de biología y matemáticas.



Felicidades, idiota.  
Que estos catorce sean diminutos para todos los que te quedan.
Los que nos quedan.







Nami!

miércoles, 24 de noviembre de 2010

- Perdone, profesor. ¿Puedo hacerle una pregunta?
- Sí, claro. - Dijo con una sonrisa que decía que estaba tan orgulloso de lo que había dicho que solamente podían hacerle preguntas a favor.
- ¿Dónde narices le han dado la titulación de Ética y Filosofía? Es que, que yo sepa, Franco no puede repartir titulaciones desde la tumba.


Nami!

martes, 23 de noviembre de 2010

Peste de sociedad.

Una vez más me sorprendo con otro miembro más de mi familia tan extensa.
Por no acordarme de ella, no me acordaba ni de su nombre... Bendito facebook. Y bendita la madre que los parió a los cuatro hermanos. ¡Qué pedazos de tios tengo!
Empezamos hablando de lo típico ¿Qué tal? Hace mil y más que no nos vemos...
Y acabamos hablando de lo que realmente nos afecta ahora: La sociedad, el mundo, la política, la reforma laboral...
Sarita, eres una pequeña roja con ganas de cambiar el mundo y ansias por saber y saber más, para conseguir hacerlo. Con una verborrea alucinante y madurez según mi pariente mayor. Y si según ella, no me falta razón y tengo mucha iniciativa y blablabla... ¿Por qué la cosa no cambia? Hay más gente que piensa como yo. Sé que no es tan fácil pero lo vemos demasiado complejo para lo que en realidad será.
Se empieza con cosas pequeñas y luego se llega a lo más grande. Se empieza por el cimiento para llegar después al tejado. De las masas hacia arriba... Estamos cansados de orilo, repetirlo... Democracía, democracía...
Creo que va siendo hora de empezar a hacer algo de verdad y dejar de quejarnos tanto porque así, no se llega a ningun lado. Ya lo estamos viendo.
- El mundo no se puede cambiar, Sara - Dicen los fachas de mi clase- Está muy bien como está. Si no te gusta tu país lárgate. No queremos rojos como tú en España.
- Desde luego, con gente como tú y pensamientos así, el mundo no cambiará nunca. Nos quedaremos estancados y sólo iremos a peor. Si también está el país ¿cómo coño hay tantos millones de parados? ¿Tanta crisis? ¿Tanta pobreza, hambre... Miseria? ¿Por qué estamos en esta puta decadencía que nos come ahora y nos comerá en el futuro próximo que es a la hora de trabajar? ¿Qué coño piensas hacer en tú futuro? ...
Me iría, pero este mundo es todo igual. Tan igual que no hay igualdad en ninguna parte del mundo.  
¿Mercantilismo? ¿Liberalismo? ¿Neoliberalismo? ¿Globalización?
Todo la misma mierda.

Nami!

domingo, 21 de noviembre de 2010

Oh! My Rock N’ Roll



¡Oh! ¡Mira! Es el Rock N' Roll el que recorre tus venas.
Es el Rock N' Roll el que te hace no poder dejar de bailar... Pero, ¿sabes?
No es el Rock N' Roll el que no te deja parar de mirarle, no.
Tampoco es el Rock N' Roll el que te hace sufrir cuando no lo tienes cerca, ni el que te produce el echarle de menos, ni el que te hace sonreír cuando te da un beso.
Se llama Amor. Y cuando está de buen humor y se queda a charlar y a pasárselo bien con nuestro amigo Rock N' Roll... Te conviertes en la niña más feliz del mundo.
Te lo aseguro.

Nami!

Me sentí mejor.



And a day, I can see the blue sea and the dark night.
And I felt better.
He relieved the sound of the waves and the soft sand between the fingers of my feet. I calmed down. And the soft one shines it moved my hair, took it from me of the face. I felt free.
I felt well.

Nami!

Una noche más en el círculo.

Los sentimientos me envuelven. Mis oídos se bloquean para el murmullo de la sala y sólo puedo escuchar la música que forma su voz y el resto de instrumentos. Sólo puedo recordar y descifrar la letra de ese tango que tantas cosas me quiere arrancar. 
Su voz grave y las vibraciones del violín al rozar el arco con la cuerda me ponen los pelos de punta. Absolutamente todos los poros de mi piel intentan abrirse para recibir también esa triste melodía e inundar mi sangre.
No puedo ni parpadear para no perder(me) ni una sola nota. Y es que su voz desgarrada de emoción, me desgarra el corazón y mis ojos lloran porque duele. Duele tanto que grito una y otra vez: ¡Bravo! porque quizás, escuchar su voz, el sonido de las cuerdas frotadas por el arco del violín, el gemido frágil, brillante y contundente del acordeón y los acordes, notas de paso, floreos y dedos corriendo por encima de las teclas del piano, puedan calmar(me) a este compañero que no quiere olvidar(me) lo que en principio ya es agua pasada.

Gracias, Ritango.
                    Gracias, Círculo.











Nami!

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Fascinación.


Sus palabras se posan en mi piel, ella las absorbe, circulan por la sangre hasta llegar al corazón. 

Ahí, se quedan retenidas y aceleran el pulso a medida que llega la información a mi cerebro.

Los dos juntos, cerebro y corazón, van enviando señales a diferentes partes del cuerpo.

Se me abre la boca, no puedo creer lo que oigo y cómo narices es capaz de trasmitirme todo lo que siente al recitar.

Los pelos se me ponen de punta al sentir como mi corazón se contrae con cada palabra como si fuesen punzadas.

Me entra un escalofrío que recorre mi espalda hasta llegar a la nuca.
Sólo le veo a él y solamente le oigo a él. Estoy no concentrada, sino lo siguiente...

Miles de emociones más llegan al oirle recitar.
Finalmente, se me empañan los ojos y deseo que no se dé cuenta. ¿Lo habré conseguido?



Nami! 23. Oct. 2010

martes, 16 de noviembre de 2010

Un mal recuerdo con cariño

Es curioso e incluso asusta cuando oy con prisas pero se me ocurren nada, un par de frases para escribir y no puedo no pararme y escribirlas en algún sitio. Voy sacando la libreta y el boli de la mochila mientras ando hacia el banco más cercano y sentarme a escribir. 
Una vez que estoy sentada no pierdo tiempo, escribo en seguida para que no se me vaya la hora ni la inspiración.

Se me quebraba la voz. 
Era gafe hasta decir "basta". Cómo no, me tocaba a mi exponer delante de toda la clase el tema por el que peor lo estaba pasando en estos momentos, el que no me dejabada dormir: Amor, por supuesto.
Tenía la voz cascada de haber estado llorando la noche anterior mientras preparaba la exposición y finalmente, había optado por imporovisar, abrir mi corazón.
Pude haberme echado a llorar ahí mismo. Sinceramente, no sé como no lo hice.
Me temblaban las piernas y la última palabra se me corto. Pero no lloré.
Me senté y hundí la cabeza en mis mangas mordiéndome el labio para no derramar ni una lágrima.
Una mano me cogió el hombro mostrándome todo el apoyo posible pero no la notaba. Me sentía completamente sola y hundida en lo más hondo de mis recuerdos. En lo más hondo de mi dolor.
En lo más hondo del desamor.



Nami! 15.Nov.2010

viernes, 12 de noviembre de 2010

Cómo felicitar a una abuela.

Buena pregunta. Estamos acostumbrados (o yo al menos) a contentarnos con un simple felicidades. 
¿Qué le vas a decir a tu abuela? Escríbele algo bonito... 
En un papel no me viene a cuento. Muy anticuado para una abuela tan moderna y guay como la mía...
Sí, señores. Tengo una abuela que usa Internet y sigue mi blog, me da ánimos para seguir escribiendo por muy pésimas que sean las entradas y que además de preocuparse por mi en persona lo hace a través de la red. ¿Qué más se puede pedir? 
Yo os lo diré:
Se puede pedir, por ejemplo, que sea muy, muy, muy pero que muy feliz siempre.
Se puede pedir, que viva mucho, mucho, mucho pero que mucho más.
Se puede pedir, que me siga cuidando tanto, tanto, tanto pero que tanto como lo hace.
Se puede pedir, que nunca, nunca, nunca pero nunca pierda esa bonita sonrisa.
Se puede pedir, que le hagan muchos, muchos, muchos pero que muchos regalos. Materiales e inmateriales. Pero bonitos, como ella.
Se puede pedir, que se me ponga buena. Muy, muy, muy buena. Pero que muy buena. Que ahora estaba resfriada y eso, sí que no se puede pedir.

... Un momento, creo que no soy yo la que tiene que pedir hoy. Yo no cumplo años. Así, que imagino lo que pedirá ella...

-Hoy, podríais venir a casa a comer, es mi cumpleaños, no tenéis ninguno ningún plan, ¿verdad?
-Niña, ¿no te gusta? ¿No quieres comer un poquito más?
-¿Qué prisa tenéis? Quedaros un ratito, ¿no?

... Todos conocemos a nuestras abuelas. 
Bueno, unos más que otros pero ninguno del todo. Y casi nadie, se hace una ligera idea de la poco que la conoce. 
Como ella, yo también crezco, y me doy cuenta de cuan interesantes son las abuelas y cuantísimas cosas tienen para contar. 
Lo que te pueden llegar a entender con cosas tan sumamente simples como el adorar estar sola un día o dos... O enseñarte a través de su experiencia, con ejemplos, anécdotas... 
Como todas las personas mayores pero ellas... Más. ¿Por qué? Porque son las abuelas. 
Las abuelas, joder. La persona que más te mima en el mundo y no quieres que se vaya nunca, nunca, nunca pero nunca porque la necesitas. 
La persona que aunque te tires mucho tiempo sin ir a verla, porque eres una vaga y no encuentras el momento justo para ir, (o al menos yo) sabes que está ahí y no se puede marchar porque tiene que vivir mucho más, ¿Verdad abuela?
Te quiero.
Nami!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Mayonesa y café

Un profesor en su clase de Filosofía, sin decir palabra, agarró un frasco grande y vacío de mayonesa y lo llenó con pelotas de golf.
Luego, preguntó a sus estudiantes si el frasco estaba lleno y ellos estuvieron de acuerdo en decir que si.

De nuevo, sin decir nada, el profesor agarró una caja llena de canicas y la vació dentro del frasco de mayonesa. Las canicas llenaron los espacios vacíos entre las pelotas de golf.
El profesor volvió a preguntar a los estudiantes si el frasco estaba lleno y ellos volvieron a decir que si.

Cogió una caja con arena y la vació dentro del frasco. Por supuesto, la arena llenó todos los espacios vacíos, y preguntó nuevamente si el frasco estaba lleno.
En esta ocasión los estudiantes respondieron con un 'si' unánime.

Enseguida agregó dos tazas de café al contenido del frasco y efectivamente llenó todos los espacios vacíos entre la arena. Los estudiantes reían en esta ocasión. Cuando la risa se apagaba, el profesor dijo:
Este frasco representa la vida;
Las pelotas de golf son las cosas importantes como la familia, los hijos, la salud, los amigos, …
Son cosas que, aún si todo lo demás lo perdiéramos y solo éstas quedaran, nuestras vidas aún estarían llenas.
Las canicas son las otras cosas que importan, como el trabajo, la casa, el coche, etc.
La arena es todo lo demás… las pequeñas cosas.
Si ponemos primero la arena en el frasco, no habría espacio para las canicas ni para las pelotas de golf.
Lo mismo ocurre con la vida; Si gastamos todo nuestro tiempo y energía en las cosas pequeñas, nunca tendremos lugar para las cosas realmente importantes. Presta atención a las cosas que son cruciales para tu felicidad.
Juega con tus hijos, dedica tiempo a revisar tu salud, ve con tu pareja a cenar, practica tu deporte o afición favoritos...siempre quedará tiempo para limpiar la casa y reparar la llave del agua.
Ocúpate de las pelotas de golf primero, de las cosas que realmente importan.
Establece tus prioridades, el resto es solo arena…

Uno de los estudiantes levantó la mano y preguntó qué representaba el café..
El profesor sonrió y dijo:
Que bueno que me hagas esta pregunta… Sólo es para demostraros, que no importa cuan ocupada tu vida pueda parecer, siempre hay lugar para un par de tazas de café con un amigo.

A veces, hay eventos plastas enviados por las redes sociales, que sientan bien. Pero jode la clase al los próximos profesores de filosofía.



Nami!

Prohibido hablar.

Silencio.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Amadeus-In

Sentirme importante, grande... Público a mis pies (menos que otras veces, pero al fin y al cabo, público)
Olvidar el miedo escénico, la vergüenza. Comenzar a cantar, tocar, bailar, sonreir como si fuese lo qunico que existiese en esa hora y media. Estoy cansada, con ganas de dormir, medio ronca y mala pero ¿qué más da? ¿Tengo un público ahí fuera esperando a que cante y ahora me voy a quejar? ¡Sí, hombre! ¿Y lo próximo que es, dejar el coro porque estoy agobiada con los estudios? ¡¿Estamos tontos o qué?!
Habré tosido unas 20 veces a lo largo del concierto pero sabía controlarlo lo máximo posible y toser donde podría hacierlo por lo que no se ha notado tanto.
Me he emocionado, me he equivocado, me he reido, he disfrutado, he aprendido... No ha sido el mejor concierto de mi vida, ni mucho menos, no ha destacado por nada en especial. Nada más especial que el resto pero a la vez lo ha sido porque... ¡Joder! Ha sido un concierto. Además, me ha visto gente que quería que estuviese ahí, otros no han podido... Pero ya habrá más. Yo por lo menos, pienso seguir mucho, mucho tiempo. En este coro, otros, y los mios propios... Toda mi vida.





Nami!

miércoles, 3 de noviembre de 2010

El día se ha ido.

Ahora andará por otras tierras,
llevando lejos luces y esperanzas,
aventando bandadas de pájaros remotos,
y rumores, y voces, y campanas,
ruidoso perro que menea la cola
y ladra ante las puestas entornadas.

(Entretanto, la noche, como un gato
sigiloso, entró por la ventana,
vio unos restos de luz pálida y fría, y
se bebió la última taza.)

Sí;
definitivamente el día se ha ido.
Mucho no se llevó (no trajo nada);
sólo un poco de tiempo entre los dientes,
un menguado rebaño de luces fatigadas.
Tampoco lo lloréis. Puntual e inquieto,
sin duda alguna, volverá mañana.
Ahuyentará a ese gato negro.
Ladrará hasta sacarme de la cama.

Pero no será igual. Será otro día.

Será otro perro de la misma raza.

Ángel González

Gracias Suso.

Nami!

De verdad, que no lo sé.

Esto era un hombre que no sabía combinar. 
Llevaba sudaderas naranjas con camisetas rojas, sudaderas rojas con camisetas naranjas,
estampados con rayas, rayas con estampados,
camisas de gala con pantalones rasgados, cuellos de pico con redondos, etc. 
Las peores pintas dentro de lo medianamente normal. 
Pero, no sé, de verdad que no lo sé, si era su mirada abierta de par en par en dirección a su alma que iba a clavarse directamente a lo más profundo del corazón o, quizá, esa monda de naranja con una fila de dientes no perfectos. Esa sonrisa que salía cuando menos la esperabas pero, a la vez, sentías que llevas con ella en la memoria toda la vida y sino lo estaba, ya no saldrá.
Y no sé, de verdad que no sé, qué tiene ese hombre extravagante con su pelo despeinado de persona ajetreada, ojeras a causa de más de un día sin dormir... Puede causar este sumo interés en una niña, como aún lo soy yo.
Sentarme en primera fila y pasar años escucharle decir, cantar, narrar, recitar... Palabras. Que ni siquiera muchas son suyas, sería un sueño.
Podría estar admir-ando y vel-ando porque esa media sonrisa no desaparezca.
Y sí, es llegar a casa, quitarme el vestido y palestina, ponerme medio pijama, tirarme en la cama con pantalones, botas y todo prácticamente, a escribir sobre él, esa persona extraña que por una aun más extraña razón también, no me deja de sorprender.

Nami!

martes, 2 de noviembre de 2010

Y esa cabrona vuelve a atacar otra vez.

Y llegará el día en el que tú pises estas tierras, duermas en mi casa y vaya a recogerte a la parada.

Sí, llegará el día en el que brindemos en el sótano, hagamos gilipolleces y riamos a carcajadas.

Llegará el día en el que te abrace gustosamente, te sonría agradecidamente y te pida que te quedes unos días más.

Llegará el día en el que te presente a mi gente, desfasemos un rato y vuelva a sonreír porque estás conmigo.

Llegará el día en el que te escriba en la agenda, cantemos como locas una y otra vez nuestras canciones y te recuerde que siempre me tendrás a tu lado.
Llegará el día en el que pasemos las noches hablando, aprovecharemos hasta el último segundo juntas y nos hartemos a comer como cerdas.

Llegará el día, otra vez, en el que volvamos a reclamar ese puto abrazo y pueda dártelo sin tener que echarlo de menos durante un gran periodo de tiempo que se convertiría en eterno...
¿Por qué no puedo dártelo ya?
¡Ah! Se me olvidaba, la puta distancia.

Nami!

lunes, 1 de noviembre de 2010

A Mariela le asusta eso de hacer un trío pero hablando con la supuesta chica con lo que lo haría, más su novio, se lo plantea y le pica la curiosidad. Esa chica, siempre ha pensado que le atrae pero como es una tía y ella es "de lo más heterosexual" es que la quiere mucho y es su mejor amiga, vaya que hay mucha confianza. Está totalmente segura de que nunca se plantearía el estar con ella para nada pero si tuviera que hacer eso con alguien sería con ella.
A Elena le pica bastante la curiosidad y su novio lleva repitiéndolo de broma pero con un punto de sinceridad mucho tiempo y fue ella la que eligió a Mariela como chica, no lo haría con nadie más. Habla con ella y lo que en un principio iba a ser un no rotundo de parte de ambas se acaba convirtiendo en un: "¿por qué no?". Y después, algo que creen que no deben dejar pasar ahora que tienen oportunidad.

Nami!

Lo conseguí

Sabías que todo se iba a arreglar pero aun así, al hacerlo te sientes llena, viva..
Sus lágrimas te saben a verdad, arrepentiemiento...
Te saben a triunfo, amistad.
Y todo te sonríe, pasas una buena noche, una buena fiesta y un buen sueño. Sueñas pues, que todo es como ahora, sueñas con la conversación y sonríes porque ahora es cierta y que todo, absolutamente todo, se puede arreglar o al menos, puede acabar mejor que peor.
Ahora, ha acabado mejor que bien. Mejor que mejor.

Nami!