lunes, 24 de mayo de 2010

Un simple soplo de aire.

Un soplo de aire me sorprende por la ventana. Refresca mi cabeza y mente.
Un soplo de aire fresco me devuelve a la vida, a la positividad...

Miro la ventana, y el cachito que me deja ver la persiana, bajada algo más de dos tercios, veo un inmenso azul que se degrada casi al blanco. Un cielo celeste que me hace recordar... ¿Qué va a ser? Unos ojos. Esos ojos.
Sonrio, pues sé que lo he conseguido. Mi mente no me hace soñar que le beso, ni que me dice que me quiere, ni que se lo digo yo... No.
Simplemente, recuerdo su sonrisa, sus abrazos... Le echo de menos.
Ha pasado demasiado tiempo y necesito renovar la alegría que me traje al pasar allí unos días.
Queda menos, me limito a pensar. Mas necesito que sea pronto.
- Carpe diem, pequeña - Me digo para mis adentros.
- Tempus fugit, por favor - Contesto.

Y un nuevo soplo de aire me hace recordar que esperará el tiempo que haga falta.
Vuelvo a sonreir, pues recuerdo por qué es mi mejor amigo.

Nami! 20. Mayo. 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario